La ciudad cruzada por canales. Llegamos alrededor de las
diez de la mañana, lo primero que pudimos observar es un canal que se encuentra
junto a la estación de trenes. Recibimos todas las instrucciones del día y
comenzamos a caminar por vías estrechas entre edificaciones de 3 y 4 pisos.
Calles en las que se puede abrir los brazos y tocar las casas que están a la
izquierda y a la derecha. Venezia es simplemente hermosa, los chicos
disfrutaron de cada esquina, vitrina y plaza en la que se erigen muchas veces
estatuas o fuentes en su centro.
También se dieron cuenta que la señalización en todas las
calles indican donde se encuentra la Plaza San Marco. Al llegar a ella, cruzando
el gran canal por su puesto, pudimos ver la Catedral, la Torre del Reloj y una
serie de tiendas de ropa, relojes y otros artículos de marca que rodean la
plaza.
Comimos el refrigerio enviado por el Convitto y tuvimos casi
2 horas para que una vez ya ubicados, podamos realizar una caminata a nuestro
gusto, volviendo a los sitios más lindos (difícil escoger uno!) y recibimos una
cantidad para escoger la heladería más llamativa y servirnos un “gelato”.
A las cuatro y media fue el encuentro en la Plaza San Marco
y la siguiente actividad fue tomar el Vaporetto que es un medio de transporte
muy novedoso en el que por medio de los canales se movilizan cientos de
personas. Hay varias paradas y en la última, en la Ferroviaria, nos bajamos
para caminar hasta la estación de tren y regresar a Cividale.
Recibiendo las explicaciones de Juan Francisco al llegar a Venecia |
No hay comentarios:
Publicar un comentario